Ayer leí en el Diario de Navarra que las ventas de coches en septiembre cayeron en España un 1,3% en relación al mismo mes de 2010. Desde el sector de la automoción advierten que estas cifras son las peores registradas en los últimos tres lustros y piden a gritos recuperar el Plan Prever.
En el transcurso del año ha habido 787.191 matriculaciones menos y ello repercute directamente en el envejecimiento de los vehículos que circulan por las carreteras españolas. El director general de la patronal de los fabricantes (Anfac), Luis Valero, advierte que “en 2012, un 42% del total de los vehículos tendrá más de diez años” si el Gobierno no aplica ninguna solución.
La crisis es, una vez más, la causante de es
ta situación. Las familias no poseen de liquidez para hacer frente al gasto que supone comprar un coche, ya sea nuevo, de segunda mano o de km 0, y los bancos, en este contexto de inestabilidad económica, han cerrado el grifo de los préstamos.
A estas alturas, resulta incluso complicado hacer frente a los gastos que supone el mantenimiento de un coche: gasolina o gasoil, seguro, impuestos, revisiones… Ante este panorama, quién va a pensar en una limpieza de tapicerías, tan conveniente realizar de vez en cuando.